jueves, 5 de septiembre de 2013

#ParaVos Capítulo 13


Le abrí la puerta. No podía parar de temblar.
-Hola, mi amor. –Me dijo y me encajó un beso.
-Hola.
-No sabes todas las cosas que tengo que hacer, estoy a mil. No creo que vaya a dormir hoy, ni siquiera empecé a hacer la valija, comprar algunas cosas, sacar plata del cajero. De todo, no sé ni siquiera si voy a poder visitar a los chicos porque…
-Benja. –Lo corté, me estaba aturdiendo. Necesitaba tener mi mente ordenada para dar ese paso. Él me miró. –Tenemos que hablar.

-Últimamente estuve un poco confundida, desde hace casi dos semanas me estuvieron pasando cosas. No sé cómo explicarte. Bah, si sé, pero es complicado. Me sentí mal conmigo misma, me daba cosa decírtelo, pero ¿qué es de una relación sin sinceridad, no? Espera, ¿vos queres que te lo diga? Porque si no queres puede que no valga la pena. –Estaba en ese momento que me cortaba, no estaba respirando entre palabra y palabra. Me moría de nervios, me sentía directamente una mala mina.
-Podes decirme lo que quieras, mi amor. Vos sabes que tenemos confianza.
Cerré los ojos y lo largue.

-Creo que me están pasando cosas con Peter.

El hecho de que Benja no hablara fue lo que más me perturbó. Se quedó petrificado por varios minutos, mirándome directamente a los ojos. No tenía cara para mirarlo fijo, veía como una relación de años se caía a pedazos. Lo veía a él, tan lindo ¿cómo me dejó de producir todo lo que me producía? ¿Cómo una persona que era tanto dejó de serlo? ¿Había dejado de serlo? No sabía.
Se paró en seco, ahí lo pude ver bien. Tenía la cara destruida, toda roja y los ojos llorosos. Sus manos se habían cerrado y tenía dos puños tensadísimos.
-¿Es solo confusión? Porque nosotros estábamos bien, Lali. Estábamos bien, no podemos dejar de estarlo. Yo sé que es solo confusión, estoy seguro.
Hubo un minuto de silencio, pero fueron como seis días.
Se acercó y me dio un beso, un beso fuerte. Sentí sus lágrimas contra mis cachetes, cómo le temblaba la cara. No lo corrí, quería tener un beso más. ¿Quién sabía? Podía ser el último.
-Esto es solo confusión, yo lo sé. Mañana me voy a ir a Cuba, después a México y vas a ver que cuando yo vuelva se va a haber acabado la confusión. ¿O no? Es solo confusión.
-Sí, puede ser. –Quise decir, pero en vez de mi voz salió un susurro, toda la voz cortada. Como si no tuviera oxígeno para hablar.
Así, Benja se fue.

Me tomé una hora para respirar, salí al balcón. Necesitaba aire fresco, un poco de la soledad de la noche de Buenos Aires.
Cuando ya me sentí tranquila, marqué el número de Euge. Necesitaba hablarle, era una necesidad.

A penas sentí que Euge levantó el teléfono empecé a hablar, le lancé todo.
-Le dije todo. Sí boluda, le dije todo a Benja. No sé de dónde junté el valor, pero me salió, y fue rarísimo. Se puso a llorar, cosa que no me esperaba, me dio un beso, me afirmó que todo lo que me pasaba era una confusión y se fue. Tengo un quilombo en la cabeza, creí que me iba a decir que era una trola, me iba a putear, que se iba a sacar, estaba preparada para todo salvo para esto. Tengo grabada en la mente la cara de Benja, todo y no sé qué hacer. Igual ¿sabés qué? Ahora que lo pienso, menos sé que voy a hacer con Peter, ja. Que bardo que es todo esto.
-¿Con Peter? Se escuchó del otro lado del teléfono.
Me paralicé.

Era la voz de Peter. 

2 comentarios:

  1. No la podés dejar así!!! Seguila me encanta, un beso @MartuPerichinsk

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  2. Escuchó todo!!!!!.¿Podrías quitar la verificación d palabras?.Gracias.

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