miércoles, 11 de septiembre de 2013

#ParaVos Capítulo 15



Abrí la puerta sin ni siquiera preguntar quién era, estaba bastante segura de que era él.
Lo vi, estaba envuelto en su campera. No sé por qué, pero hacía mucho frío esa noche, más de lo normal. Estaba parado en la puerta, con una gran bufanda y una campera negra, mirándome fijo. Asomó su cabeza y me sonrió.
Entramos los dos sin decir nada. Cuando llegamos a living, empecé a hablar.
-Lo que quise decir, cuándo dije lo que dije y vos escuchaste no es tan como lo escuchaste. O sí… No sé. Bueno, el tema es que vos no tenes por qué involucrarte, no tenes que hacerlo si no querés. Esto es una confusión mía. Yo estaba, o estoy, con Benjamín…
Hablé mucho, sin respirar. Me moría de vergüenza, me sentía patética diciéndole todo lo que me pasaba. Él no hizo más que escucharme, todo el tiempo, mirándome fijo a los ojos.
-Lali, –me interrumpió. –Sentate. Y respira. –Me dijo, calmado. Lo obedecí. Me senté justo al lado de él, nuestras piernas se rozaban.
-¿No me vas a decir nada? –Le dije de mala gana.
-Sí, quería que te sientes para poder decirte todo. Hace tiempo que venía aguantándome cosas, yo siempre sentí que nuestra historia no era un capítulo cerrado. Ya sé que sabes todo esto por la China, la conozco lo suficiente y si no hubiera querido que te enteres no le hubiera contado a ella. Fuiste muy importante en mi vida, pero vos ahora estas con Benja, o por lo menos estabas hasta ayer…
Se hizo un silencio incómodo.
-Con Benja cortamos, creo. La verdad no entendí bien. Pero sí, tenes razón.
Me apoyé en su hombro, estaba cansada y nerviosa. Cerré los ojos un rato, estábamos los dos en silencio nuevamente.
-¿Y ahora qué? –Le pregunté.
-No sé. Hasta ayer tenías novio, y no sé, es muy complicado que me digas esto.
Lo miré fijo, a los ojos. Extrañaba mucho su carita, sus ojos, su todo, me agarraron tremendas ganas de besarlo, como cuando estábamos en la reunión con Cris, solamente que esta vez no me detuve.
Lo agarre de la cara y le di un beso, no fue muy largo pero fue perfecto. Él me miró confundido. No le salían las palabras de la boca.
-¿Y Benja? –Fue lo único que pudo decir.
-No lo menciones, por favor. Ya me siento lo suficientemente culpable como para que hables de él.
No pareció gustarle lo que le dije. Se paró de golpe.
-Para, yo no quiero hacer nada ilegal. Si vos estuvieras disponible, si no vinieras de una relación de varios años que se terminó hace quince minutos, no sé, la cosa sería diferente. –No lo decía enojado, su solidaridad me hizo amarlo más por un segundo, en ese momento estaba pensando en Benja…. Me sentí tan estúpida que no me salió nada más que ponerme a llorar.

-Tenés tanta razón. Pero, ¿sabes qué? Te amo, o eso creo. Estoy pasando por una situación de mierda, no paro de pensar en vos. Yo creí que eras pasado, ¿sabías? Vos eras mi pasado, cosa que ya no. En unas semanas, te convertiste en el centro de mi vida. No más Benja, vos. Y no sé, Benja lo supo y reaccionó muy raro. Pero yo soy una tarada, te pongo en una situación horrible, perdóname. Nuestra relación de ex estaba bastante bien, no sé por qué la arruiné. Perdoname, por favor. –Le dije, me sentía una inútil. Me sentía más que todo, egoísta. Me quedé llorando, en silencio.

Peter se acercó a mí y me abrazó, respiraba muy agitado. Me dijo al oído:
-No sé cómo va a seguir esto, no sé nada. Solo sé que sos hermosa. Y cuánto te extrañaba…
Y me dio un beso. Y QUÉ beso, inolvidable.





2 comentarios: